La autoestima es el ingrediente mágico que te ayuda a conseguir el equilibrio en tu vida y es la causa del malestar emocional de muchas personas. Por eso hoy respondo a una pregunta que te harás con frecuencia: ¿Cómo mejoro mi autoestima?
Mucho se ha escrito sobre este tema y estoy segura de que la teoría te la sabes, pero la pregunta importante aquí es ¿Qué debo hacer para empezar a quererme?
Puedes plantearte cualquier objetivo: trabajar en aquello que te gusta, aprender un nuevo idioma, tener una pareja extraordinaria, hacer deporte, comer más sano…
Pero si no tienes una buena autoestima, despídete, porque la falta de autoestima construye un muro de hormigón entre tu y lo que quieres lograr.
Si tu vida sentimental no es como te gustaría, si tienes la sensación de que siempre caes en los mismos errores en tus relaciones de pareja, si encontrar una pareja que sume en tu vida parece una misión imposible, tómale el pulso a tu autoestima.
Y para que dejes de preguntarte «cómo mejoro mi autoestima», te voy a dar 10 tips para que empieces a quererte y consigas el nivel de autoestima que necesitas para tener la vida que deseas tener.
La importancia de la autoestima
La autoestima es la imagen que tienes de ti misma y de lo que te crees capaz. Por ello, no conseguirás nada si no te crees, te ves y te sientes capaz de ello.
La falta de autoestima se puede reflejar de muchas formas diferentes.
- Puede que te sientas inferior o pequeña.
- Que tiendas a compararte siempre con los demás.
- Tal vez nunca te atrevas a hacer las cosas que te gustan al no sentirte capaz.
- Es probable que te valores poco.
- O que no sepas decir que no.
Son muchas las manifestaciones de la falta de autoestima pero si no tienes una buena autoestima no vas a ser capaz de dar los pasos correctos y necesarios para conseguir lo que quieres.
Cuando confías en ti no hay quién te pare. Tomas las riendas de tu vida y te atreves a hacer las cosas, porque te sientes capaz de ellas.
Eres capaz de ver las oportunidades que la vida te pone delante donde otros solo ven obstáculos.
Y luchas porque sabes que vas a conseguirlo, mientras que otros se dan por vencidos ante la mínima dificultad y tiran la toalla.
Si no tienes la vida que te gustaría tener, si te sientes frustrada en algunos aspectos de tu vida pero no sabes qué hacer para cambiar eso, o te sientes incapaz de ello, tómale el termómetro a tu autoestima para saber si es lo que te está frenando.
Empieza a preguntarte «cómo mejoro mi autoestima» y toma acción para ponerle remedio YA.
Insatisfacción
Si la falta de autoestima es la causa de tu constante insatisfacción, es probable que te sientas diferente a los demás y que salgas siempre mal parada al compararte con los demás.
Te verás como la persona más débil, la más insegura, la más torpe, la menos atractiva o interesante.
Sé cómo te sientes. Yo también he pasado por eso. Tenía una constante sensación de no ser suficiente para nadie. Creía que me faltaba algo para ser una mujer valiosa y que no merecía las cosas buenas que le pasaban a otros.
El resultado
El resultado de todo esto es que me conformaba con lo que otros me daban, sin pensar si eso era lo que yo realmente quería, y jamás pedía lo que necesitaba. Y al actuar así vivía en una constante insatisfacción.
Cuando tienes baja autoestima te pasas la vida intentando deshacerte de la necesidad de ser aprobada constantemente por los demás o de que te digan lo bien que lo haces.
Luchas para dejar de pensar que todo es por tu culpa y para liberarte de lo que opinen los otros.
Y en realidad todo esto que te pasa son síntomas de tu falta de autoestima. Y esos síntomas desaparecerán cuando soluciones el problema que los causa.
Por ello es muy importante que tomes conciencia de lo que está pasando y te preguntes «cómo mejoro mi autoestima», porque al hacerlo empezarás a moverte para encontrar la solución.
El ingrediente necesario
La autoestima es el ingrediente necesario para alcanzar nuestros objetivos y para poder vivir una vida tranquila y feliz.
Por ello, es importante que mejores tu autoestima, porque cuando te quieres empiezan a llegar a tu vida cosas maravillosas.
Y tu me dirás de nuevo, “todo esa teoría ya me la sé” pero…
¿Cómo mejoro mi autoestima?
Te voy a dar 10 tips para que sepas lo qué hacer cuando te preguntes «cómo mejoro mi autoestima» y así logres añadir este ingrediente mágico a tu vida:
1. Mímate y haz cosas que te gusten. ¿Qué haces cuando quieres a alguien? Le cuidas, le haces sentir bien, estás pendiente de sus necesidades, le tratas con cariño, ¿no es así?
Entonces, ¿qué mensaje te estás dando a ti misma si no te mimas y sólo te exiges? Pues el de que no te quieres. Así que haz una lista de cosas que te hagan feliz.
Escribe cosas sencillas, que puedas hacer cada día, que no requieran nada especial. Momentos especiales por ti y para ti, como un paseo, un baño relajante, una llamada a una amiga, media hora leyendo tranquilamente… Y asegúrate de hacer una de esas cosas cada día.
2. Establece tu lista de prioridades. Qué sueñas, que es importante en tu vida, qué quieres que haya en ella, de qué no quieres arrepentirte en un futuro, cuáles son tus valores.
Ten siempre muy presentes tus prioridades para que no se te olvide que es lo que te mueve y te inspira.
3. Lleva las riendas de tu vida. Ponte objetivos y ve a por aquello que quieres para que sientas que avanzas.
Si te mueves solo por inercia, aceptando sin más las cosas que llegan a tu vida, como si tu no tuvieras nada qué opinar ni que hacer, irás sin rumbo y no tendrás la vida que realmente quieres tener.
Así que escribe una lista de aquellas cosas que quieres conseguir que de verdad te ilusionen y motiven, y que sean metas alcanzables, que estén al alcance de tu mano. Establece un plazo de tiempo realista y concreto para hacerlas y dividide ese objetivo en pequeños pasos.
4. Cumple los objetivos que te pones. Cuando deseamos algo pero no hacemos nada para conseguirlo es solamente un deseo, un anhelo. Y esto nos genera frustración e impotencia.
Por ello, márcate tres objetivos que te gustaría alcanzar en tres ámbitos distintos de tu vida (por ejemplo, trabajo, ocio y pareja) y después define qué pasos necesitas dar para cada uno de ellos.
5. Pierde el miedo a «fallar». Todos tenemos ese derecho. No pasa nada porque no salga a la primera, no eres la única persona a la que le sucede esto.
Lo que pasa es que cuando nos comparamos con los demás tendemos a ver sólo sus éxitos, y no sus fracasos. Pero la vida se trata de correr riesgos, de vivir experiencias y aprender de ellas.
No pasa nada porque alguna vez no te salga como esperabas. El concepto de perfección es tremendamente limitante, libérate de él.
6. Ponte en primer lugar. Esto significa que pongas por delante tus necesidades, tus deseos, tu tiempo, tus objetivos. Si no lo haces, te pasarás la vida trabajando para los demás, haciéndolo todo por otros y te olvidarás de ti y de lo que quieres.
Atrévete a decir y a pedir lo que quieres. Sin miedo, sin vergüenza y sin pudor.
Si tienes hijos o personas a tu cargo, también tienes derecho a mirar por ti, porque lo primero sigues siendo tú y cuidar a otros no significa que te descuides tú.
7. Háblate bien. Si nos diéramos cuenta de la cantidad de basura mental que acumulamos, y que ha llegado hasta ahí por lo mal que nos hablámos.
Nos maltratamos, decimos que no vamos a ser capaces, que es imposible, que yo para eso no valgo, no puedo, no sé… Pocas cosas hay que le sienten tal mal a tu autoestima.
Así que empieza a escucharte y aprende a hablarte a ti misma como lo harías con tu mejor amigo.
Saca la basura mental, vacía tu mente de todas esas historias que te cuentas, y empieza a utilizar un nuevo lenguaje cuando te hables. Eres un fiel reflejo de lo que te dices.
Al principio puede resultarte difícil porque te has habituado a ese lenguaje tóxico, pero con constancia y persistencia lo lograrás. Es como cuando aprendes un nuevo hábito, que necesitas repetirlo muchas veces para adquirirlo.
Por ejemplo, en vez de “seguro que si me preguntan diré alguna tontería”, puedes decirte “diré algo rápido y sencillo para no liarme demasiado. Seguro que me defiendo bien”.
8. Valora tus pequeños logros de cada día. Esas cosas que crees que no tienen importancia, como sacarle una sonrisa a un amigo que estaba triste, o terminar algo que te ha costado mucho hacer.
Las personas con una baja autoestima siempre se están juzgando y tienden a fijarse en lo que podrían haber hecho mejor, minimizando o restando importancia a sus éxitos cotidianos.
Atribuyen su éxito a la suerte o a que era muy fácil o a que alguien les ayudó. No son capaces de reconocérselo y casi todo lo consideran insuficiente. En cambio sí son capaces de reconocer el éxito de los demás.
Por ello, para que te acostumbres a valorar lo que haces bien, te animo a que al final de cada día apuntes dos o tres cosas por las que te sientas orgullosa de ese día.
9. Compórtate como la persona segura que te gustaría ser. Seguro que muchas veces miras a alguien y piensas “¡me encantaría ser así!”.
Pues eso mismo, sólo que la persona en la que tienes que pensar es en ti. Visualízate a ti misma siendo y haciendo eso que deseas: sonriendo, caminando con decisión, hablando con seguridad, relacionándote con otros, diciendo que no cuando es justo eso lo que quieres decir, hablando con voz firme…
Nuestra mente no distingue entre lo real y lo imaginado, así que si practicas las visualizaciones a diario le ayudarás a creerse que realmente ya eres esa persona en la que estás pensando. Te aseguro que funciona ;-).
10. Cuida tu cuerpo. Haz ejercicio, duerme bien, lleva una dieta sana, vístete con ropa que te guste, arréglate… Se trata de que, sin convertirlo en una obsesión, te gustes y te sientas bien cuando te mires al espejo. ¡Incluso para estar en casa!
Cuidar y ocuparte de tu aspecto físico es una señal de buena autoestima. ¡No te descuides!
¡Ya no tienes excusa para seguir con una autoestima baja! Si eres consciente de todos los límites que la falta de autoestima está poniendo en tu vida, para que logres aquello que quieres, TOMA ACCIÓN.
Cuando te preguntes «cómo mejoro mi autoestima», aplica estas recomendaciones y si necesitas ayuda, contacta conmigo y lo haremos juntas.
